Está claro que el TC actual poco se parece a los de una década atrás, ni hablar de los modelos anteriores. Esto se debe a un cambio rotundo que decidió implementar la categoría más importante del país luego de la pérdida de Guillermo Castellanos, precisamente un 22 de abril de 2007 en Comodoro Rivadavia.
En aquella jornada, la Máxima disputaba la quinta fecha del calendario en el autódromo General San Martín, aquel que iba a quedar en un recuerdo agridulce para Matías Rossi por su primera victoria en la divisional.
La final llevaba seis vueltas cumplidas, hasta que en la séptima el Chevrolet del piloto de 9 de Julio embistió al Dodge de Pedro Dandlen, quien había quedado cruzado en la pista luego de un trompo. En esa maniobra también estuvieron involucrados Ernesto Bessone y Laureano Campanera. El personal de rescate trabajó intensamente sobre la unidad Nº 47 para retirar a Castellanos, quien fue derivado al Hospital Regional de dicha ciudad donde luego se conoció la triste noticia.
A partir de allí, la ACTC decidió bajar a los acompañantes para la próxima fecha, la cual se desarrolló en Paraná y Christian Ledesma fue el vencedor. La otra medida llegó en septiembre, de forma obligatoria, y cambiaría para siempre la fisonomía de los vehículos en pos de mejorar la protección de los pilotos: los pontones.
Guillermo Castellanos tenía 40 años. Debutó en el Turismo Carretera en la temporada 2006 en Mar de ajó, donde arribó 11º. Corrió 18 competencias en total.