Desde el promisorio debut con una «pole» en el autódromo de Buenos Aires, hasta el primer festejo en la Fórmula 1 en el Gran Premio de Brasil, transcurrieron poco más de 60 días para que Carlos Alberto Reutemann comenzara a tutearse con el escalón más alto del podio de la especialidad.
El santafesino consiguió ser el ganador en Interlagos, a bordo del Brabham BT34 tras el retraso y abandono del crédito local, Emerson Fittipaldi, quien lideraba la carrera hasta que su Lotus 72 presentó inconvenientes para continuar en la pista.
«Recuerdo que hacía mucho calor y la multitud llenaba Interlagos. Fue una carrera de pocos autos en una pista muy larga (el trazado tenía casi 8 kilómetros). Estaba en segundo lugar, Emerson rompió y gané. Solo sabía que se había roto después de mucho tiempo. No debe haber sido muy emocionante para el espectador”, analizó con su particular estilo el propio Reutemann, años más tarde.
La prueba, que no otorgó puntos para el campeonato, se corrió el Jueves Santo de 1972, y la ganó Reutemann tras 37 vueltas, y 1h37m16s248, a 181,679 Km/h. Su escolta fue el sueco Ronnie Peterson (March) a 30s656, y tercero, a 1m03s044 arribó Wilson Fittipaldi, hermano de Emerson y compañero entonces del piloto argentino en la escudería Brabham que comenzaba a regentear Bernie Ecclestone, quien así festejó también su primera victoria como dueño de equipo en F1.
Testigo de aquél triunfo del argentino fue Carlos Alberto Legnani, director de Campeones, quien nos recuerda detalles de la competencia que se disputó el 30 de marzo de 1972 y que relató para nuestro país, la cual sirvió de punto de partida para que la presencia de Brasil en cada calendario de Fórmula 1 sea ininterrumpida hasta la actualidad.
RECORDAMOS CON CARLOS LEGNANI AQUÉL PRIMER ÉXITO DE REUTEMANN EN BRASIL