El paso del Turismo Nacional por Centenario dejó autos con golpes más que significativos, en especial en la Clase 2, donde Facundo Bustos y Martín Blasig fueron los más perjudicados en cuánto a la destrucción de sus respectivos automóviles.
“El auto no sirve más, la carrocería en sí quedó muy dañada. Fue muy fuerte el impacto, tal es así que se rompió mucho el motor, se cortaron hasta lo árboles de leva. También se metió la araña en la pedalera, fue una desaceleración tremenda”, detalló Gabriel Rodríguez, preparador del Nissan March que conduce Blasig.
“El auto terminó muy comprometido, lamentablemente no sirve más, una lástima que termine así. Del auto se arruinó la jaula y se compromete toda la suspensión. Del motor en principio se dañó la pata del motor, creo que la caja se salvó y el resto del motor también”, explicó por su parte Joaquín Telo, titular del equipo que integra Facundo Bustos.
“Veremos cómo seguiremos, tenemos algunas alternativas. Estamos pensando en la construcción de un auto nuevo, pero no hay demasiado tiempo para la próxima carrera”, detalló Telo.