No es piloto, pero como todo arrecifeño natal se nutre del automovilismo y la pasión por la mecánica desde la cuna. «Arrecifes es una ciudad en la cual pareciera que uno de chico mama aceite en vez de leche. Son todos apasionados por el automovilismo«, aseguró Guillermo Cruzzetti en diálogo con Campeones, sobre cómo se vive esa pasión en cada esquina de la «Cuna de Campeones«.
Tras recibirse como ingeniero electrónico, Alberto Canapino lo convocó, a través de un amigo en común, para que se sume al equipo Peugeot Sports de TC2000, que entonces reunía a Juan María Traverso y Miguel Ángel Guerra, en donde desarrolla la Inyección Electrónica de Combustible, y obtienen el Campeón de TC2000, en 1995 y Subcampeón en 1996, con Traverso al volante de uno de los 405.
«Mi mentor y tutor en todo lo que se y aprendí fue Alberto. Más allá de lo que me enseñó técnicamente, la pasión que desbordaba por el automovilismo era muy contagiosa«, repasa sobre sus inicios en la actividad con el recordado preparador, con quien comenzó a trabajar el 4 de mayo de 1994, gestándose desde entonces un vínculo con quien fuera su referente en la faz técnica del automovilismo nacional, en el taller de Arrecifes.
Además de Peugeot Sports, durante el recambio técnico de TC2000 en 1997 con los motores de 16 válvulas, trabajó bajo las órdenes de Canapino y Oscar Castellano en el equipo Chevrolet, que marcó el retorno de General Motors a las carreras nacionales tras veinte años, y lleva a cabo también el desarrollo de la inyección electrónica de los motores que se preparaban en Lobería, además de ser el responsable de la adquisición de datos.
Cruzzetti siguió ligado con Canapino durante los años posteriores, afrontando las evoluciones de los Chrysler Neon de Ernesto Bessone y Pablo Peón (1999 – 2001), en el área motores junto a Rafael Balestrini, especializándose en la adquisición de datos. En 2002 se asocia con el preparador y constructor, en Canapino Sports S. A. y se aboca a la dirección de la empresa y es responsable del CTC (Centro Técnico Canapino) en la ciudad de Arrecifes.
En medio de sus atenciones en Turismo Carretera, trabajó en el proyecto de Colcar Racing Team, escudería que se forjó para correr en las ediciones del Dakar y las competencias de Cross-Country en Argentina y Sudamérica, con los Mercedes-Benz ML, a cargo Juan Manuel Silva, Martín Maldonado y Hernán Kim, a partir de 2014, y luego con el Prototipo Colcar RT.
«Tuve la oportunidad de estar en muchos proyectos y durante seis temporadas hicimos el Dakar, compitiendo de igual a igual con los equipos europeos. Fue una experiencia inolvidable, que me dio muchos conocimientos. Cuando ASO decidió irse de Sudamérica se cortó el proyecto apoyado por Colcar, porque era inviable para nuestros costos ir a correr a Arabia Saudita. Siempre está la idea latente de volver a intentarlo«, sostiene sobre aquellos veranos dakarianos.
Desde 2021, y ante el inesperado deceso de Alberto Canapino, tomó a su cargo la dirección técnica del equipo YPF Chevrolet de TC2000, con los Cruze de Agustín Canapino y Bernardo Llaver, en tanto que también siguió vinculado a los proyectos de Turismo Carretera, con Squadra Canapino, primero, y luego con Rus Med Team, que se amplía a TC Pista, TC PickUp, TC Mouras y Fórmula 3 Metropolitana.
«Ante su ausencia me vi con la responsabilidad de seguir adelante con proyectos ya empezados y otros encaminados, en donde él era la cabeza, y hemos tratado de hacerlos de la mejor manera posible, obviamente confiando de mucha gente que estaba vinculada detrás suyo«, admitió Cruzzetti sobre el rol de ejercer la dirección técnica de los autos que se alistan en Villa Carlos Paz, adonde viaja cada semana.
Con respecto a las primeras carreras del año de 2022, en donde el equipo YPF Chevrolet fue vencedorr en Bahia Blanca y Concordia, con rotundos «1-2» de Canapino y Llaver, el ingeniero manifestó: «Hemos empezado muy bien el año, no caben dudas. Una vez que terminó la temporada pasada nos pusimos a pasar en limpio algunos desarrollos que no pudimos completar y plasmar ideas que por la cantidad de pruebas limitadas al cabo del año no se podían llevar a cabo«.
«Nos animamos a ir a la primera carrera con cosas nuevas que nos dieron un salto de calidad y estamos firmes en lo competitivo. Esto es el inicio. porque todos los equipos evolucionan, y el correr con este sistema de lastre, iguala la performance de todos«, indicó, quien ya elabora una nueva estrategia con el resto del equipo de cara a la carrera del fin de semana en Centenario, Neuquén.