Los Grandes Premios quedaron para siempre en la historia del Turismo Carretera, con los ídolos abriendo caminos y rutas, transitando por cientos de parajes, pueblos y ciudades. El último se disputó en La Pampa hace 36 años, cuando un 7 de diciembre de 1986 caía la bandera rendida sobre la trompa de esa Dodge que maneja Pedro Roberto Doumic.
El Club Deportivo Winifreda estuvo al frente de la organización con Carlos Alberto Legnani como pieza fundamental para la realización de la prueba, como ya había ocurrido en 1983.
Juan Antonio De Benedictis, Oscar Castellano y Oscar Angeletti, todos con la marca Dodge, llegaban como candidatos principales al título, que finalmente fue a manos del último mencionado.
El necochense fue el encargado de abrir ruta con su Dodge verde, con Satriano encabezando el clasificador en los kilómetros iniciales. Dos destacados pilotos presentaban rápidamente inconvenientes, Mouras con la presión de aceite y Oscar Aventín reventando un neumático primero y la rotura de biela después.
Esa primera etapa (Santa Rosa, Riglos, Macachín, Santa Rosa), tuvo como vencedor a Juan Antonio De Benedictis, seguido por Julio Salgado, Pedro Doumic y Antonio Aventín, todos con Dodge, mientras que quinto se ubicaba Osvaldo Morresi con Chevrolet.
De Benedictis y Satriano tirando juntos alcanzaron 275 km/h, antes del abandono del piloto de Chevrolet por una falla en el motor. José María Romero tuvo un vuelco impresionante con su Dodge y terminó en un campo, con su auto incendiado. Mientras que Jorge Oyhanart desertó por una fisura en el cárter de su Ford.
La segunda jornada, Santa Rosa – General Pico de 441 kilómetros (pasando por Bernasconi, Guatrache, Macachín, Catriló y Quemú Quemú), vio el retraso de “Johnny” De Benedictis por inconvenientes en el diferencial. Mientras Juan Carlos Nesprías pasaba a liderar sobre Castellano, Morresi, Urretavizcaya y Paolucci.
La tercera y última jornada, de 500 kilómetros con largada y llegada en General Pico, no solo presentaba lucha por la punta de la carrera, también estaba en juego la definición del campeonato.
Osvaldo Morresi se detenía imprevistamente ya que un “chimango” se había metido por la toma de aire, esto le ocasionaba un retraso importante, a tal punto que al pasar por General Pico el nuevo puntero de la general era Pedro Roberto Doumic.
Angeletti y Castellano peleaban por el título, hasta que la rotura del cigüeñal dejó a “Pincho” con las manos vacías. Unos kilómetros más adelante el piloto de Burzaco también abandonaba al romper el cárter, por lo que el nuevo monarca no logró ver la bandera a cuadros.
Urretavizcaya ganó esa tercera etapa y con el segundo lugar, Pedro Doumic se aseguró el triunfo en el clasificador general, prevaleciendo sobre José Luis Paolucci, Osvaldo Morresi, Juan Carlos Nesprías, Oscar Spinello, Eduardo Marcos, Edgardo Caparrós, Oscar Alaux, Marcelo González y Osvaldo Sasso.
Fueron 1498,4 kilómetros, donde 89 protagonistas quedaron en la historia por haber disputado el último Gran Premio de Turismo Carretera, donde el “Tolo” Doumic ganó por única vez en la categoría, marcando con su Dodge el promedio de velocidad más alto de toda la historia de la categoría: 248,777 km/h. Mientras que Oscar Angeletti se llevó de La Pampa su único título de TC.