En el recorrido de Roure hacia Beuil, el francés que pilota uno de los Ford Puma híbridos perdió el control de su auto, golpeó contra el muro de piedra que acompaña la cinta asfáltica y salió despedido hacia el barranco. Afortunadamente, tanto él como su copiloto Alexandre Coria, también galo, resultaron ilesos gracias a la buena calidad de la jaula de protección del auto.
El prometedor piloto, llamado a ser el heredero de los Sébastien, había arrancado bien la primera fecha del 2022 y, tras las primeras dos etapas, se ubicaba en la cuarta colocación de la general a apenas 4,2s de Ogier, con todavía 15 etapas para el final. Sin embargo, en la primera de hoy este accidente le costó daños irreparables en su auto y la imposibilidad de continuar en el Rally de Montecarlo.