El año 2005 quedó grabado en la historia del Turismo Carretera por distintas particularidades. La principal, el retiro de Juan María Traverso. Otra fue la definición en Buenos Aires entre Juan Manuel Silva y Rafael Verna, donde la imágenes mostraban una cosa y el sensor otra, siendo el “Tabo” finalmente ganador. También por la consagración del “Pato”, alcanzando así su único campeonato de TC. Y entre todo eso, algo muy particular que finalmente no se concretó: “La Carrera del Siglo con las Glorias del Ayer”.
Una competencia especial, donde los pilotos de ese entonces iban a compartir sus autos con expilotos, mayores de 50 años y con un mínimo de 4 temporadas alejados de las pistas. La fecha elegida era el 11 de septiembre, y para ello el miércoles 17 de agosto se realizó una jornada de pruebas en el autódromo de Buenos Aires.
Fue un día muy especial, ya que apellidos como Pairetti, Cupeiro, Marincovich, García Veiga, Aventín, Satriano, Oyhanart, Landa, Calamante, Garro y Del Río, entre otros, volvieron a sentarse en un auto de carrera.
Oscar Aventín con el Ford de su hijo Diego fue el más veloz en el legendario circuito 12, donde el campeón 1991/92 marcó una vuelta de 1.43.889, quedando cerca del récord que por ese entonces tenía “Lalo” Ramos con 1:42.222.
Nerviosismo, adrenalina y emociones fueron algunas sensaciones de grandes nombres que aceleraron, en muchos casos, después de una gran cantidad de años. Un toque entre Marincovich con Norberto Bressano fue un llamado de atención, ya que allí se dañaron los vehículos que pertenecían a Guillermo Ortelli y Miguel Ángel Etchegaray.
Mariano Calamante con el Ford de Emanuel Moriatis fue segundo con 1:44.449, seguido por José Malisia (Ford de Acuña), Néstor Jesús García Veiga (Dodge de Fontana), Rubén Daray (Ford de Silva), Miguel Ángel Konjuh (Ford de José Luis Ricciardi), Thomas Harpe (Ford de Ponce de León), Jorge Giorgi (Ford de Urretavizcaya), Juan Manuel Landa (Dodge de Pablo Soto) y Carlos Alberto Garro (Chevrolet de Sergio Alaux) fueron los 10 más rápidos en aquel ensayo.
Sin embargo, tras esa jornada cargada de emociones, desde la ACTC tomaron la decisión de no realizar la competencia especial. “La decisión fue tomada por la comisión directiva en vista del poco tiempo y las limitadas posibilidades actuales de ensayos para que las “glorias” puedan adaptarse convenientemente a los requerimientos de los modernos vehículos de la categoría”, señaló el comunicado, poniéndole punto final a lo que fue solamente una gran ilusión.