Este martes, en las oficinas de la Nascar Cup Series tomaron la determinación de sancionar a Bubba Wallace tras el episodio sucedido en la vuelta 95 de la carrera del último domingo en Las Vegas, que terminó con el de Toyota, Kyle Larson y Christopher Bell fuera de competencia.
Si bien el error inicial lo cometió Larson al llevarlo contra el muro y hacerlo impactar con su Camry, Wallace tuvo la gran idea de ir a chocar directamente el Camaro #5, entrando en trompo e impactando en la parte trasera de Bell que justo pasaba por el lugar. Esa maniobra terminó con los tres afuera de carrera, y el que se llevó la peor parte fue Bell que lucha por meterse entre los cuatro por el título.
Luego de eso, Wallace se bajó de su auto y fue directamente hacia donde estaba Larson, que era ayudado por los oficiales de pista con sus elementos personales. Sin esperar un segundo lo empujó dos veces mostrando su enojo, algo que también le hizo notar a uno de los oficiales que intentaba frenarlo para avisarle que debía acudir al centro médico para los chequeos obligatorios tras ese tipo de golpes.
Pese a que el lunes publicó en sus redes un comunicado pidiendo disculpas, la agresión dentro y fuera de la pista ya había sido vista y notada por los comisarios de la categoría. Es por ello que Wallace se perderá la próxima carrera en Homestead-Miami.
De acuerdo al reglamento, el corredor rompió las secciones 4.3.A y 4.4.C del Código de Conducta de los Miembros de Nascar. Steve O’Donnell, jefe de oficiales de la categoría, explicó: «Fue un acto muy peligroso. Fue intencionado y puso en riesgo a otros competidores y cruzó la línea. No es normal suspender pilotos, por eso no tomamos esta acción de manera liviana».
Por el momento, en el 23XI Racing no confirmaron quién se estará subiendo al Toyota #45 para la próxima carrera. Además, no apelaron la decisión, por lo que evidentemente le harán cumplir la pena a Wallace sin reclamar a las autoridades para que pueda estar en Miami.
