Omar Martínez demuestra su vigencia, y 32 años después de su primer título nacional -fue en Fórmula Renault en 1990-, buscará otra consagración, la que puede alcanzar este fin de semana en el autódromo de San Nicolás.
“Venimos con un presente muy bueno con el equipo, a partir de Río Cuarto viene funcionando todo muy bien, se está trabajando con mucho esmero y en todos los detalles”, contó el entrerriano dialogando en la tira diaria de Campeones.
El “Gurí” se ubica segundo en la “Copa Shell” de TC Pick Up, a 9 puntos de Valentín Aguirre, con claras posibilidades de alcanzar el éxito, lo que también intentará su hijo Agustín (está tercero a 16 puntos de Aguirre).
“Soy un agradecido a Dios por darme esta posibilidad de pelear un campeonato con mi hijo. En un momento hicimos el 1-2 en clasificación en La Plata, en Río Cuarto y en Neuquén también peleamos juntos, es una inyección que a uno le da correr con el hijo. Lo estamos viviendo a pleno”, describió Martínez, quien contó más de esto tan particular que le toca vivir.
“Es raro, me pasó en Río Cuarto con la pole cuando le saqué el 1, un padre hace todo lo mejor para que el hijo funcione bien. Se sigue trabajando de la misma manera, lo disfrutamos mucho, no me lo voy a olvidar nunca”.
Campeón de Fórmula Renault en 1990 y 1991, de Top Race en 1997, 2000 y 2006 y de Turismo Carretera en 2004 y 2015, Omar Martínez demuestra su vigencia y está en la antesala de buscar una nueva corona.