Tras los ensayos con Andrés Jakos en La Plata, los Toyota Camry llegaron a Centenario con algunos beneficios otorgados por la técnica de la ACTC, en la faz mecánica con un cambio en la medida del difusor y en lo aerodinámico con un alerón de mayor proporción para conseguir una estabilidad en el tren trasero, que adolecía en Viedma.
Al analizar su performance en la pista neuquina, Matías Rossi habló con Campeones y manifestó: «Presumimos un avance. Al principio se habló mucho sobre el funcionamiento del Camry, y es un aprendizaje para todos. Con estos cambios estamos tranquilos porque son cosas que uno imaginaba. Estamos trabajando y aprendiendo, y sobre todo dándole una devolución a la categoría«.
«El auto por ahora está difícil. Más o menos parecido a lo de Viedma, porque tenemos algunos beneficios para la marca, en cuanto al difusor. Con respecto al alerón vimos que el coche cargó en el sector trasero y tiene buen andar en curva, pero estamos lentos en las rectas. La diferencia de velocidad es muy importante«, respondió con respecto al rendimiento y cómo acusó el Camry esas modificaciones.
Rossi entiende que este proceso demandará un tiempo, pero está seguro que la marca japonesa progresivamente será protagonista en TC. «Es un aprendizaje para todos, y con un futuro muy bueno. Si bien el presente no es bueno, el futuro lo será porque Toyota es una marca que apuesta a largo plazo«, aseguró el piloto de Del Viso.
¿Cómo se puede mejorar este rendimiento? El campeón de 2014 expresó: «No me gusta decir lo que hay que hacer. Sí me gusta decir lo que le pasa al auto. Estamos en un proceso y no es tan sencillo. Se en el proyecto que estoy y vengo mentalizado para trabajar y acomodar el Camry«.
Según indicó, en los próximos días se estaría resolviendo hacer una prueba de ambos Toyota y cruzar la información para corregir y encontrar más soluciones en la performance, junto a su compañero Jakos y el resto de los integrantes de la escuadra, que supervisa técnicamente Christian Kissling, y seguramente con el seguimiento del departamento técnico de la ACTC, a cargo del ingeniero Alejandro Iuliano.
«Tal vez se llevarán los dos autos en vez de hacerlo de a uno, hacer las pruebas cruzadas y ver más modificaciones, porque esto que pasó con el Camry fue una sorpresa importante; es un modelo muy aerodinámico en la calle, pero cuando se lo transformó en un TC mostró otra cosa«, indicó Rossi, comparando además el auto de calle con el que corre.
«Con la capacidad de los ingenieros y la experiencia de la ACTC, tienen muchas más herramientas -para solucionar- porque ya lo vivieron cuando pasamos a esta estructuras de autos tubulares y de ahí derivaron todos. Entonces el Ford sufrió ajustes para que pueda competir con la Chevy«, recordó sobre aquellos ensayos que equipararon a las marcas de TC.
De todas maneras, Rossi aseguró que con estos cambios «estamos tranquilos porque son cosas que uno imaginaba«, y mostró su confianza en que con el trabajo se irán ajustando y corrigiendo los contratiempos para contar con la quinta marca de TC en condiciones de ser competitivo pronto.