Con amargura y desazón, tanto Matías Rossi como Marcelo Ciarrocchi y el resto del equipo Toyota Gazoo Racing Argentina cerraron el sábado en Río Cuarto tras el inesperado toque entre ambos durante el desarrollo de la primera competencia del fin de semana de TC2000, y que los marginó de pelear por posiciones de vanguardia cuando intentaban superar a Figgo Bessone (Renault), en el frenaje al final de la extensa recta principal.
«Estaba pasando a Figgo en la curva 1 y creo que ‘Chelo’ (Ciarrochi) pierde el auto por alguna razón que no logro identificar. Fue mala suerte nomás, Marcelo es muy respetuoso para correr y es un gran compañero de equipo» aclaró el «Misil» ante los micrófonos de Campeones Continental AM 590.
Por su parte, Ciarrocchi se mostró mucho más apenado y luego de algunos minutos, ya avanzada la noche, accedió a hablar con Campeones, continuando amargado por el incidente con su compañero: «Fue una maniobra desafortunada. Perdí la referencia intentando ir por afuera y me lo terminé llevando a Figgo y a Matías».
En los boxes, en tanto, los mecánicos e ingenieros, bajo la supervisión de Darío Ramonda, trabajaron sobre los Corolla, reparándolos y reemplazando las partes de carrocería y otros elementos afectados para ponerlos en pista este domingo.