A fines de la década del ’70, el TC atravesaba un momento particular en cuanto a la lucha de marcas: Ford y Chrysler dominaban las estadísticas, Torino no podía presentarle batalla y apareció la «Chevy«, fabricada por Chevrolet para patear el tablero.
Tal es así que Francisco Espinosa, oriundo de Chacabuco, se quedó con el título 1979/1980 y fue el primero en hacerlo con ese modelo. Su auto, con el #11 en los laterales, con base blanca y negra, quedó marcada en los hinchas del ‘Moño’ (pese a que el Colo pintó el 1 en un Ford al año siguiente).
Un apasionado del automovilismo en todo sentido es Lionel Ugalde: múltiple campeón zonal, subcampeón de TC (continúa en actividad) y fanático por la restauración de vehículos, ya sea de competición, o de calle.
El marplatense había iniciado, durante la pandemia, un proyecto que involucraba restaurar la máquina de Espinosa. Después de horas y horas de trabajo junto a su equipo, terminaron la obra: «Lo hicimos en mi taller. Conseguimos el casco original, que estaba tirado en un galpón y muy deteriorado, y lo armamos exactamente como estaba en la época».
«José Luis Riga, quien era copiloto de Espinosa, nos dirigió y le hicimos la misma preparación de aquel entonces. Hoy el auto está como para correr en la misma época que corrió», agregó Ugalde.