El final de la carrera en Martinsville el año pasado, por la anteúltima fecha de la temporada y con el pase a la final en juego, quedó en la memoria de los amantes y no tanto de este deporte por la espectacularidad de la misma: Ross Chastain se fue contra el muro de la última curva para aprovechar la velocidad de su Chevrolet y superar cinco autos, aventajando a Denny Hamlin para dejarlo fuera de la lucha por el título.
Rápidamente esta situación explotó en las redes y hasta sus propios rivales se quedaron maravillados por la situación. Pero con el correr de los días y pensando seriamente la situación, la categoría empezó a trabajar para buscar una solución y no permitir que se vuelva a dar una situación similar.
A pocos días de empezar la temporada con el Clash en el LA Coliseum, desde este año será ilegal la maniobra en todos los tipos de circuitos. Elton Sawyer, vicepresidente senior de Nascar, aseguró que el cambio se da basado en el desarrollo de la seguridad de los pilotos.
‘Es para asegurar que los pilotos no emplearán estrategias que podrían comprometer la seguridad de los otros corredores. Se aplicará una sanción de tiempo a cualquier competidor que intente una maniobra insegura como la realizada en Martinsville‘, se explica en el comunicado de la categoría. Y agregó el VP: ‘Hemos trabajado desde el final de la temporada con los pilotos y equipos para encontrar la mejor manera de interpretar la regla para 2023, creemos que esta es la mejor manera de seguir desarrollando la seguridad de los competidores‘.
El campeón del último curso, Joey Logano, reconoció que le fascinó la maniobra pero a su vez indicó: ‘No hay regla en contra de eso, pero la tiene que haber porque no va a ser bueno ver a todos los pilotos apoyándose en el paredón en la última vuelta de cada carrera. Si las barreras no estaban bien colocadas, con alguna puerta mal cerrada o una lámina corrida se enganchaba el auto y habría sido un gran riesgo que Ross estuvo dispuesto a correr‘.
