En 2006, Valentino Rossi atravesaba quizás el mejor momento de su carrera como piloto de MotoGP. Con cinco títulos de la máxima en su haber, las ofertas le llegaban por todos lados y hasta Ferrari mostró interés en él para realizar una prueba en un monoplaza de F1. «Stefano Domenicalli me llamó y me dijo: ‘¿Por qué no pruebas uno de nuestros coches? Tenemos una pista rápida en Fiorano, hagamos un test aquí«, reveló quien por ese entonces pilotaba para Yamaha.
«The doctor» aceptó la invitación y acordó que la prueba se realizaría en Valencia, por lo que puso rumbo al Ricardo Tormo para girar sobre un auto de la empresa italiana, algo por lo que siempre se mostró apasionado. Y no decepcionó ni mucho menos, sino todo lo contrario, porque marcó tiempos similares a los que realizaba por ese entonces un tal Michael Schumacher.
Si bien eso no lo hizo de arranque porque el primer día lo utilizó para asentarse en el nuevo auto, en la jornada siguiente dio la muestra de que con dos o cuatro ruedas puede ir al límite siempre. En esa oportunidad, su mejor registro lo ubicó en la novena colocación de los mejores tiempos entre otros 14 pilotos de Fórmula 1, a apenas siete décimas de los logrados por «el kaiser».
Eso puso automáticamente el contrato a su disposición. Sin embargo, en Ferrari tenían una idea diferente para él en el caso de lograr un acuerdo: «Había un plan para pasar a la F1, pero no directamente con Ferrari. La intención era que comenzara con un equipo más pequeño, gane experiencia y, si iba lo suficientemente rápido, pasaría a Ferrari«.
Eso cambiaba la escena, ya que Rossi debía dejar la cresta de la ola en la que se encontraba arriba de las motos para ser un piloto de mitad de parrilla en la F1, y no era sencillo de realizar. «Me decían: ‘Elige F1, ve a Ferrari’, porque eso era algo importante. Pero cuando llegué a casa decidí seguir en MotoGP. Mi corazón me dijo que me quedara en MotoGP”.
El resto es historia conocida. Valentino siguió en el MotoGP y lo hizo por varios años más hasta que se retiró en 2021 con una de las carreras más laureadas de todos los tiempos en el deporte motor. Quedará la incógnita de lo que hubiera sucedido si decidía sumarle dos ruedas más a su día a día, pero para una persona con un talento innato como el suyo más temprano que tarde los resultados también se le iban a dar.