Tras el anuncio del retiro de Sebastian Vettel se sucedieron varios cambios de butaca en la Formula y el más inmediato fue el de Fernando Alonso, que pasó de correr para Alpine a hacerlo en Aston Martin a partir de 2023, ocupando el lugar vacío que deja el tetracampeón alemán.
Luego de la última fecha en Abu Dhabi, que marcó su complicado cierre en la escuadra francesa tras un abandono por una fuga en el impulsor, Alonso inició su campaña con la escudería británica en los tests de postemporada. Y lo hizo con una sonrisa de oreja a oreja tras casi cien vueltas, terminando conforme por demás con el andar de su nuevo monoplaza.
Tras terminar los ensayos de ayer, el asturiano exclamó: ‘Estoy felizmente sorprendido de todo. El auto de este año no está al nivel del que conduciré el año que viene. No va a ser una continuación de este auto’, explicó sobre lo que espera del 2023 y lo ilusionado que afronta el nuevo reto.
‘Tuvieron un gran fin de semana, Sebastian (Vettel) clasificó delante mío, no hubo mucha diferencia entre Aston Martin y Alpine y sentí un auto competitivo en los tests, ambos terminamos en los puntos y es un buen auto’, analizó respecto al nivel mostrado por los autos verdes en el último fin de semana oficial de la temporada.
Y agregó sobre las sensaciones que tuvo en el último tiempo: ‘Soy mucho más optimista ahora. Cuando firmé con Aston Martin estaba feliz en un 90%, cuando empezaron a mejorar en el cierre de la temporada era un 100% y ahora más todavía’.
‘Cuando me dijeron los kilómetros recorridos por el motor usado en los tests me preocupé, porque era un número alto para lo que acostumbro en los ensayos. Pero hicimos 97 vueltas sin problemas, asique es destacable’, acotó en el cierre acerca del desempeño de su vehículo en el trazado de Yas Marina.