Distendido, en un diálogo al estilo podcast, el CEO de la Fórmula 1, Stefano Domenicali, dejó estos comentarios hacia los circuitos clásicos de la competición mundial. La charla se dio en «Passa dal BSMT» y cuando se tocó el tema de los circuitos emblemáticos enviaron mensajes claros.
«La competencia cambió, el contexto es más agresivo y, evidentemente, el cariño solo ya no alcanza»
Se le preguntó a Domenicali si un circuito puede mantenerse en el calendario actual solo por su historia y respondió «NO«, explicando que «obviamente, si un Gran Premio tiene un valor histórico es un plus, pero no es suficiente«. Incluso Domenicali, que conoció la F1 de antaño, explicó que «es un elemento que añade historia y es importante para alguien como yo, que sigue la F1 desde la infancia, pero para los nuevos aficionados de la F1 la capacidad de pasar página y olvidar quién ganó el año pasado es muy alta«.
«Para muchos jóvenes, hoy, correr en Montecarlo comparado con el nuevo circuito de Las Vegas no les hace diferencia»
«La historia no es un elemento fundamental para nosotros, la historia debe estar respaldada por una estructura orientada al futuro y permita invertir en infraestructura«, expresó el italiano. Con esto se explica cómo Liberty Media, desde que adquirió los derechos comerciales en enero del año 2017, comenzó a negociar los nuevos contratos con las pistas.
Poco duró Hockenheim hasta perder su lugar, en el último lustro, mientras que Silverstone adaptó su predio para ofrecer lo que la F1 de hoy necesita. Imola regresó -casi de emergencia- con la pandemia de covid-19, así como Nurburgring, en 2020; pero todo volvió a acomodarse según los requerimientos actuales. «Imola tiene un contexto de ciudad con desarrollo limitado y es difícil imaginar que se pueda ampliar, en términos de infraestructura y hoteles«, remarcó Domenicali.
La oferta llegó a 24 plazas en el mundo y se pudo trabajar en otras sedes con posibilidades, con posibilidades finitas, contractuales, como Zandvoort. Y están las pistas que asumieron el costo de la renovación, como Hungaroring en el último año. Pero no todos tienen el espacio necesario para extenderse. Por ejemplo, el GP de Argentina y el limitado terreno que se propone para la renovación del Oscar y Juan Gálvez de Buenos Aires.