Mostrando su temple y cerrando una “abstinencia” de velocidad de tres meses, Marc Márquez retomó sus entrenamientos sobre una moto para conocer su rendimiento y evaluar sus condiciones tras aquella caída que tuvo antes del Gran Premio de Valencia que le provocó una diplopia (visión doble), y que lo obligó a ausentarse también de los test de Jerez de la Frontera.
“Tengo la visión perfecta”, declaró el piloto de Cervera, de 28 años, durante la conferencia de prensa virtual que realizó Honda Racing, presentando su plantel de pilotos del campeonato mundial de Motociclismo 2022.
“Fue un proceso muy lento, pero eso ya lo sabíamos cuando conocimos qué tipo de lesión tenía. Cuando tienes este tipo de lesiones todo está sobre la mesa. Incluida la posibilidad de no volver a pilotar una moto. Es difícil, porque no sabes nada de tu futuro”, admitió Márquez.
Sobre su recuperación, aseguró que atravesó un momento de incertidumbre aguardando por saber cuándo volvería a pilotar. “Desde el punto de vista mental este fue uno de los momentos más difíciles de mi carrera. Ya es el cuarto invierno que estoy mal, primero fue el hombro derecho, luego el izquierdo, de nuevo el brazo derecho y cuando parecía que empezaba a mejorar, después de ganar otra vez en Misano, de sentirme bien, llegó otra lesión”, indicó.
De continuar esta evolución, y no tener contratiempos en su preparación, Márquez estará en los test de pretemporada que se realizarán en el circuito de Mandalika, Indonesia, el 5 y 6 febrero, y luego en Sepang, Malasia, del 11 al 13. Posteriormente, se enfocará en el primer compromiso del campeonato, que será en Qatar, el 6 de marzo.
