Teniendo pendiente una prueba, Elio Craparo recibió el permiso de la Comisión Asesora y Fiscalizadora de la ACTC para realizar un ensayo en el autódromo de La Plata con la Dodge Challenger de Turismo Carretera. No lo pudo concretar en el tiempo permitido para las pruebas, porque debió trabajar en el armado del auto tras el accidente que tuvo en Buenos Aires, a poco de terminar la carrera en el trazado porteño.
«Nos fue muy bien«, dijo el piloto de Chacabuco. «Necesitábamos una prueba para conocer en profundidad el auto, ya que nunca habíamos hecho una evaluación completa«, señaló. Había participado en la competencia de San Luis, abriendo la etapa definitoria del TC, pero llegaron con el tiempo justo al circuito puntano y no tuvo la chance de realizar un test privado con el equipo de los hermanos Álvarez.
«Hicimos muchas mediciones y trabajamos para conseguir un equilibrio en el Challenger. Primero probamos en ‘el kilometro’ durante dos horas y media, después hicimos pista, donde quedamos conformes con un tiempo de 1m21s8 con gomas usadas en el entrenamiento de San Luis» – Elio Craparo
En el cierre de la jornada colocaron neumáticos nuevos, pero por distintas cuestiones no lo pudieron aprovechar en un giro veloz. «Más allá de eso, el balance que hacemos es bueno y pudimos llevarnos mucha información para el taller«, reconoció, pensando en la carrera de San Nicolás, a disputarse el fin de semana del 4 y 5 de octubre.
