Nadie duda de que Agustín Canapino estará dentro de la Copa de Oro de Turismo Carretera y tendrá los puntos extra que le corresponden por cada victoria obtenida en la Etapa Regular. En cuanto al seguimiento matemático, se encuentra muy cerca de poder sellar de una manera indescontable su pase. Lo podría hacer al terminar el domingo de Posadas, lo que le dejará correr en San Juan Villicum y Paraná con el objetivo de ganar para acumular más puntaje bonus, o bien sumar lo suficiente como para terminar esta sección del campeonato 1º y así acceder a con otros 15 puntos extra al play off.
Con este panorama delante y el conocido recorrido de tres triunfos en las primeras competencias del año detrás es que el JP Carrera evalúa qué hacer con el nuevo auto que le han construido a Agustín. Se había diseñado una prueba comparativa con los dos vehículos el mismo día en la pista de La Plata pero el motor de uno de ellos presentó una falla y se abortó el plan. Esto lleva a reprogramar el ensayo, que probablemente se pueda concretar antes de la carrera del 7 de agosto en ‘El Villicum’.
Por el momento, desde el seno de la escuadra se mantiene la idea de que el auto actual rinde lo suficiente para pelear el campeonato. De hecho, son líderes del torneo y se muestran como el conjunto a batir. No hay apremios y tampoco se precipitaría una decisión con el auto nuevo hasta que todo esté debidamente relevado.
Si la flamante unidad demuestra un rendimiento altamente superior, tal vez la evaluación cambie los lineamientos. Pero hasta entonces, ¿es factible que el Chevrolet que se acaba de construir no sea utilizado este año en carreras oficiales?