Todo era alegría y festejos para el equipo Joe Gibbs Racing cuando cayó la bandera a cuadros en Pocono por la 21ra fecha de la temporada, habían logrado un gran 1-2 con Denny Hamlin y Kyle Busch que les permitía afianzarse entre los candidatos a la copa y el propio Hamlin pasaba a ser el máximo ganador histórico en el trazado triangular superando por uno a Jeff Gordon entre los pilotos de Nascar.
Sin embargo, en la revisión técnica no dieron los parámetros aerodinámicos y todo se dio vuelta con la descalificación de ambos autos, que presentaban ambos el mismo problema. De esta manera, quien se queda con la victoria es ni más ni menos que Chase Elliott, el líder del certamen con el Chevrolet del Hendrick Motorsport que acumula su cuarta victoria en la temporada y es más líder que nunca, habiendo ganado tres de las últimas cinco (Nashville en la fecha 17 y Atlanta en la 19).
Según explicó el director de la categoría, Brad Moran, en la revisión técnica una vez finalizada la carrera «encontraron elementos que afectan a la aerodinámica de los vehículos, estaban en la fascia delantera (elementos plásticos en el paragolpes). No había motivo por el cual esos materiales debían estar ahí y por eso se decidió descalificar a los dos Toyota«. Ambos vehículos serán llevados a los talleres de la categoría para más evaluaciones y el equipo tendrá hasta mañana a última hora para presentar la apelación.
«Analizaremos más detalladamente los Camry, pero por ahora consideramos que no encontraremos alguna otra anomalía técnica. De todas maneras los llevaremos al centro de R&D. Es desafortunado, no quisiera estar acá hablando de esto, vimos una gran carrera y lo último que quiero es venir acá y hablar de esto. Pero los equipos y sus dueños saben que los nuevos autos iban a ser recibidos con menos tolerancia y hay algunas áreas en las que no podemos dejar pasar detalles como en la generación anterior«, afirmó Moran.
«Básicamente es por la nueva generación de autos que las reglas se han reforzado, todos tienen que adaptarse a las nuevas normas y todos son conscientes de eso«, agrego en el cierre de la conferencia. Hamlin había liderado en 21 de las 160 vueltas al trazado de Pocono, incluyendo las últimas 18 para ser el vencedor, mientras que Busch lo hizo en 63, siendo el vencedor de la segunda etapa.
Con esta resolución, Elliott se lleva su cuarto triunfo del año y en el podio simbólico lo escoltan Tyler Reddick y Daniel Suárez, en tanto que el top cinco lo completan Christopher Bell, ganador de la fecha anterior, y Kyle Larson, otro de los Chevrolet del Hendrick Motorsport. Michael McDowell, Martin Truex Jr., Bubba Wallace, Erik Jones y Austin Dillon cerraron las primeras diez posiciones. Elliott lidera con 787 puntos, seguido por Ross Chastain con 682 y Blaney con 676. La próxima cita será el próximo domingo cuando la categoría visite el trazado de Indianapolis.