Carlos Sainz (hijo) calificó esta experiencia como una de las tres mejores de su vida, inclusive al nivel de su primera conducción sobre un Fórmula 1, por lo que el Rally Dakar tiene mucho de que sentir orgullo. Por supuesto, el valor emotivo de una experiencia compartida con su padre, un piloto de elite a los 63 años, hizo todo más sensible. Además, descubrió el punto de vista de un navegante o copiloto antes de estar a cargo de la conducción de un Ford Raptor del Dakar.
«Infravaloran lo que hacen, lo cerca que están de los límites. Está probar por primera vez un F1 y esto está al mismo nivel, así de impresionantes son estos autos» – Carlos Sainz (h)
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El hijo se subió por primera vez al auto del padre. Aunque esté acostumbrado a llevar una vida en medio de la Fórmula 1, la sorpresa que se llevó con los prototipos del rally raid fue emocionante. Fue gracias a unos días libres en una pista armada en la Base Militar de San Gregorio de Zaragoza.
«Esto es claustrofóbico, luego dicen que un F1 es pequeño» – Sainz (h)
«Estoy cansado y no he hecho nada. Es agotador. Es más el estrés que genera… una experiencia loca, una montaña rusa enorme«, contó el piloto de F1 luego de acompañar a su padre, del lado derecho del auto. «Sientes que arriesgan la vida en cada curva, en cada bache, en cada cambio de dirección… Parece que esa es la última de tu vida. Él está súper relajado y yo pienso ‘esto es un locura’«, continuó.
Después pudo disfrutar del manejo sobre el Ford Raptor T1+ y fue una una experiencia diferente. «Está infravalorada, en la tele parece que hay unos cuantos baches, pero lo cerca que estás de los límites… Me recuerda a la F1 porque no se ve igual que en la tele. Infravaloran lo que hacen«, aseguró Sainz Jr.
«El auto te da muchísima confianza, va tan bien sobre los baches, incluso rodando… Esperaba que fuera un poco más perezoso pero me encantó, es muy divertido. Mucho mejor conducir que ser copiloto«, agregó. Tan asombrado quedó que calificó este auto como uno de los mejores que condujo.
«Top 2 o Top 3 de las mejores experiencias de mi vida; está probar por primera vez un F1 y esto al mismo nivel» – Sainz (h)
El madrileño no descarta hacerlo en el futuro, después de lo que vivió esta semana. Por el momento, fue una devolución de gentileza al estilo Sainz, como pasó el año anterior, cuando Carlos (padre) manejó una Ferrari en Fiorano a pesar de que su hijo estaba de salida en la escudería italiana. Aquí se invirtieron los papeles y fue el heredero quien se adaptó al rally raid.
