Desafortunado resultado tuvieron los dos pilotos argentinos que participaron en la serie GT Endurance italiana, disputada en el Autódromo Nacional de Monza, y que no les permitió terminar en la competencia de tres horas.
A falta de menos de 20 minutos para concluir la prueba y cuando estaba liderando, el Audi de Nazareno López, a cargo en ese instante del americano Andrés Cantú (el otro piloto junto al suizo Jody Lambrughi), sufrió una pinchadura cuando transitaba en la chicana Della Roggia y en su intento de llegar a boxes para reemplazarla, la unidad siguió derecho en la primera curva de Lesmo, despistándose y terminando su recorrido en la cama de leca, ante lo cual no pudo continuar.
Esta contingencia le permitió al Lamborghini de Michele Beretta, Andrea Frassineti y Rodrigo Testa tomar la vanguardia y encaminarse hacia la bandera de cuadros en el «Templo de la Velocidad» tras 82 vueltas cumplidas, seis más que el coche del argentino «Nano» López, quien en las próximas horas estará viajando al país.
Matías Russo tampoco tuvo un buen domingo; el entrerriano, junto a Vittoria Piria, tuvo que retirarse en el comienzo de la carrera, cuando habían transcurrido cinco minutos y el Porsche de SP Racing Team de GT3 Cup había completado dos vueltas en el trazado italiano, pero el Lamborghini de Alessio Salvaggio, Giacomo Riva y Douglas Bolger, se pasó en el frenaje de la chicana de la recta principal e impactó contra la unidad del argentino e impidiendo su continuidad. El triunfo fue de la Ferrari de Easy Race que tripularon Lorenzo Bontempelli, Diego Di Fabio y Vito Postiglione.
La próxima ronda de GT Italiano será con las competencias Sprint en la pista de Mugello, entre el 11 y 13 de julio.
