Durante las pròximas horas se conocerán cuáles serán los planes y el programa deportivo que tiene por objetivos concretar este año en TC2000 el equipo Pro Racing, y que hasta la fecha no cuenta con pilotos confirmados para conducir los Chevrolet Cruze que estuvieron en pista con Agustín Canapino y Bernardo Llaver, hoy alejados de la categoría.
La escuadra que tenía su base de operaciones en el complejo de Villa Carlos Paz, Córdoba, tuvo que interrumpir su participación en TC2000 en la penúltima ronda de 2022 cuando una medida de fuerza del gremio de mecánicos les impidió trasladarse hasta el autódromo «Oscar Cabalén» para disputar la prueba y con ello ceder las posibilidades de pelear por el tìtulo con Canapino, el cual quedó en poder de Leonel Pernía.
Sebastián Pereyra, uno de los directivos de Pro Racing, le había anticipado entonces a Campeones sobre cuáles eran las gestiones para encontrar una solución. “No está resuelto cómo seguimos, pero es precipitado decir que no continuamos. Pensamos cómo resolverlo durante los próximos días y qué es lo mejor para el equipo y todos”, admitió.
Hasta la fecha, y transcurridos casi tres meses de aquél conflicto sindical, el equipo cuenta con varios elementos y repuestos en las instalaciones cordobesas que no pudo retirar y trasladar hasta el taller que utiliza en cercanías de Buenos Aires, en donde cuentan con los autos de TC2000 guarecidos esperando por volver a pista… una vez que los directivos de la escuadra definan la continuidad.
