Mariano Werner mueve nuevamente el tablero aun cuando los resultados han sido más que positivos en el Turismo Carretera. En el 2020 logró su primer título de TC bajo la órbita del Memo Corse, pero aquel Ford pasó por diversos talleres, entre ellos el de Ulises Armellini y el del equipo Azul Sport Team, aunque el entrerriano siempre mantuvo sus propios mecánicos.
Para 2021 se sumó al equipo de Omar Martínez. La receta de Werner fue la misma, seguir con sus fieles laderos a cargo de atender el Ford, en este caso uno flamante con el que arrancó el pasado campeonato, donde consiguió retener el “1”.
Para 2022 Werner otra vez cambia. Nuevo equipo, flamante taller en Paraná y otro Ford, pero el bicampeón mantiene su gente para alistar el auto, que no será el mismo que venía manejando. El paranaense acudió a un Ford que estaba corriendo en TC Pista Mouras para empezar el campeonato que se viene. Pero ¿cuál es la historia de ese vehículo?
Se trata del Ford “revolucionario” que Marcos Laborda construyó en 2020 por encargue de Marcelo Occhionero bajo la órbita del equipo DTA, que en principio iba a conducir Mariano Werner. Ello nunca se dio, inclusive ese auto estuvo en Tandil en el taller de Fabián Acuña.
Tras la salida de Werner del “Memo”, el Ford fue trasladado al taller de Alifraco, con la intención que Julián Santero lo utilice en el tramo final de la temporada 2021. Si bien el mendocino lo probó una vez en La Plata, nunca lo corrió.
Tras eso, el auto fue vendido a la familia Cifré de Rufino, para que el joven Faustino Cifré lo corra en TC Pista Mouras. Ello se dio en las últimas dos fechas del año, siendo Cifré 10º en Viedma y 14º en San Juan.
Para 2022 ese auto cambia de rumbo, ya que debutará en Turismo Carretera con el campeón Werner al volante. Al menos ello se dará en las primeras carreras del 2022, ya que posteriormente el entrerriano pondrá en pista un flamante Ford.