Adversarios en cada curva, rivales en cualquier campeonato. Así se consideraban Matías Rossi y Agustín Canapino en las categorías que compartían en nuestro país como Turismo Carretera y TC2000, alguna esporádica temporada en Top Race. Desde hace más de una década ambos centraron la atención de los aficionados y el periodismo cada fin de semana.
“Hablábamos más en la pista que abajo del auto”, señaló el propio Rossi al ser consultado sobre esa particular relación que mantuvo con Canapino cada temporada y que ahora se interrumpió otra vez por la nueva etapa del arrecifeño en su campaña internacional en Estados Unidos junto al equipo Juncos-Hollinger Racing de IndyCar en donde competirá con un Dallara Chevrolet.
Sobre ello, Rossi manifestó: “Si bien tenemos ambos personalidades muy fuertes, de colega a colega me alegro por él. Es un cambio muy bueno y también impensado porque no se si hay muchos casos así de pasar de un auto de turismo a un fórmula. Estoy seguro que andará muy bien y será un gran representante. Lo vamos a extrañar acá”.
También el piloto de Del Viso habló sobre el nuevo reglamento de Turismo Carretera y cómo afecta el funcionamiento su Toyota Camry. “Nosotros siempre fuimos evolucionando de manera constante con la categoría. Fue toda una sorpresa y deja un aprendizaje, el TC había encontrado una regularidad y se destacó Torino entonces consideraron (la ACTC) que la marca estaba pasada”, señaló sobre el rendimiento de los autos.
Su agenda continuará -por el momento- con dos actividades por mes en nuestro país con TC y en Brasil con Stock Car, retornando al equipo FullTime Sports, escuadra con el cual inició su campaña en la categoría en 2020 integrando el programa de Toyota Gazoo Racing Argentina.