Sebastián Halpern pudo comprobar la calidad y velocidad de la mano de obra del experimentado equipo X-Raid Team, con tantos lauros conseguidos en las últimas temporadas. Viajó a Europa para un test necesario, pues conoció al nuevo MINI 4×4 con la actualización reglamentaria T1+ que se incorporó y utilizará en el Dakar 2023. Justamente, en la carrera que se disputará del 31 de diciembre al 15 de enero en Arabia Saudita podrá disfrutar de un vehículo capaz de luchar con las Toyota Hilux o los nuevos Audi RS Q-etron eléctricos junto a su navegante, Bernardo ‘Ronnie’ Graue.
Tras un gran andar parcial en la edición previa, con un vehículo totalmente distinto, han dado un paso al frente los mendocinos. Apostaron a un desarrollo nuevo que encaró la escuadra alemana de la familia Quandt esperando hasta los primeros días de diciembre para conocer el vehículo.
«El auto va tremendo«, resumió. Ante la consulta de Campeones respecto del desarrollo, el piloto que años atrás se destacó entre los cuatriciclos (2º en 2011) remarcó que «es increíble lo que han logrado» los ingenieros mecánicos. La dupla de Halpern y Graue va por su segunda experiencia en Arabia Saudita y darán comienzo a la temporada completa del Mundial FIA W2RC de Rally Raid.
«¿A qué resultado aspiramos? Nos haría felices un top 5, pero lo veo difícil. Si volvemos con un top ten será muy bueno, debido a que llegaremos al Dakar con muy pocas pruebas realizadas»
