El Gran Premio de Singapur fue declarado «de riesgo» por la Federación Internacional del Automóvil, debido a «elevadas temperaturas» que se esperan en la semana de competencia. Es la primera vez que la FIA decreta oficialmente un peligro de estas características para una carrera, por más que se puedan recordar casos extremos, por lo que los equipos tendrán ciertas obligaciones que fueron reglamentadas.
Para el fin de semana, que tiene actividad nocturna para intentar neutralizar el extremo clima, esperan más de 30ºC. Particularmente, para la carrera del domingo. Por ello, recordando el caso de Qatar 2023 -con pilotos recibiendo asistencia médica- y las acciones que se plantearon luego de aquella vivencia, se declaró esta carrera como «de riesgo por altas temperaturas».
O llevan los equipos refrigerantes o llevan más lastre
Esta situación lleva a la aplicación del procedimiento, incluyendo la opción del chaleco de enfriamiento con un líquido refrigerado, que tuvo oposición de algunos pilotos por el espacio que ocupan los tubos. Por esto, su uso es voluntario. Lo que sí, es obligatorio montar los demás componentes de refrigeración. Esto incluye un peso de compensación que llevará a que se añadan 5 kg al peso mínimo en la carrera y 2 kg para entrenamientos y clasificación.
En el caso particular de Qatar 2023, Logan Sargeant se retiró, Esteban Ocon vomitó dentro del auto y Lance Stroll estuvo al borde del desmayo; por el calor y la exigencia físico deportiva.
