La ACTC volvió a realizar carreras especiales en 2014. Desde entonces, hubo 20 fechas en las que -de un modo u otro- el Turismo Carretera modificó su esquema tradicional de entrenamientos, clasificación, series y Final. La experiencia cosechada en todas esas competencias es la que buscan transmitir los integrantes de la Comisión Asesora y Fiscalizadora (CAF) de la ACTC para que cada evento de este tipo sea mejor que el anterior.
Rubén Salerno, Pablo Sala y Mario Gayraud (todos ex pilotos de TC) son los actuales miembros de la CAF. Los dos primeros están en Toay para -además de transmitir esa experiencia- “brindarles a los equipos soluciones a los problemas que se van presentando”, le contó el “Tano” a Campeones.
“Priorizamos escuchar a todo el mundo para que todos juntos logremos ir mejorando todo. Sabemos que tenemos errores pero estamos trabajando en la docencia, no es que sólo sancionamos. Estamos trabajando para crecer. En el intercambio con los equipos hay cosas positivas. Y también negativas, porque esto es tan competitivo que muchos buscan su ventaja. Pero nosotros queremos que se hagan las cosas bien, honestamente, sin ninguna ventaja, que sea igual para todos”, aportó Sala.
“La CAF está a disposición de los equipos y pilotos para escucharlos. Después la CAF va a tomar la determinación, con el Comité Ejecutivo y el presidente, sobre lo que se va a hacer”, añadió el lobense. “Pero que se queden tranquilos porque tenemos mucha independencia de trabajo. Nadie nos dice lo que tenemos que hacer. No hay bajada de línea. Pero tenemos sentido común: cuando sabemos que tenemos que consultar algo, lo consultamos”, aclaró Salerno.
Más allá de la predisposición al diálogo, Sala puntualizó que “el reglamento está para cumplirlo” y que “hay cosas con las que tenés que ser cortante, porque por las buenas no te entienden”. Salerno asintió y agregó: “Les damos las explicaciones, no es algo caprichoso”.
Una de las novedades de esta carrera especial en Toay es que los pilotos se dividirán en 3 grupos a la hora de ingresar a los boxes a realizar la recarga de combustible. “Hay 56 autos y 46 boxes. Así que por un tema de seguridad y para que los equipos trabajen más cómodos, hicimos grupo A, B y C en vez de Par e Impar. Y también se sorteó el orden para ingresar a los boxes porque generalmente los pilotos quieren ingresar apenas se abre la ventana por si aparece un pace car”, explicó Salerno.
Previamente se había llevado a cabo el sorteo que determinó la ubicación de la carpa para cada piloto, algo que parece simple pero también genera sus controversias. “No es algo sencillo. Hay equipos que tienen 4, 3, 2 o 1 auto, entonces tenemos que hacer subgrupos. Después vienen acá y quieren solucionar en 2 minutos las cosas que nosotros pensamos durante 3 martes seguidos”, sentenció el “Tano”.
