No fue un sábado sencillo para el equipo Red Bull y su escuadra satélite Alpha Tauri. En la Q1 quedaron fuera los dos corredores de la escuadra con sede en Faenza y bastante lejos del corte, principalmente Pierre Gasly. En la tanda siguiente fue Sergio Pérez quien no pudo hacer un tiempo lógico más allá del que le retiraron por exceso en los límites de pista y quedó undécimo. Y finalmente el campeón Max Verstappen tuvo problemas de potencia en la Q3 y terminó quedando décimo, último en ese lote clasificatorio.
Es por esto que decidieron cambiar por completo los impulsores de esos tres vehículos: el motor de combustión interna, el turbo, MGU-H y MGU-K, batería y control de electrónica. A los dos pilotos de Red Bull no les cambia mucho la ecuación y de hecho les permitirá llevar a cabo una interesante remontada largando desde la mitad de la grilla. Pero a quien sí perjudica es a Pierre Gasly, que deberá partir desde los boxes.
Los pilotos del equipo principal lo hicieron en regla y no penalizan, pero en el caso de Gasly el cambio de los últimos dos componentes mencionados están por encima de la cantidad permitida antes de ocasionarle una sanción y es por esto que largará desde los pits. El francés debería partir desde el último puesto, pero al no haber sido informado Jo Bauer, el delegado técnico de la FIA, por lo que la sanción fue aún mayor.
Será un largo domingo para los pilotos elegidos por Red Bull, con algunas complicaciones en el medio y teniendo que escalar varios puestos para sumar con consistencia. De todas maneras, han demostrado una notable mejora en la confiabilidad de sus monoplazas y será una carrera que invitará a los sobrepasos protagonizados por tres de los mejores corredores de la parrilla.
