El WEC se va preparando para regresar paulatinamente a las ocho fechas como había alcanzado en 2019, pero que por cuestiones de la pandemia del Covid-19 se vio obligada a reducir a seis en las últimas dos temporadas. Si bien no serán ocho nuevamente, con el regreso de Portimao el próximo curso sumarán siete y los directivos esperan volver con una octava en 2024.
Y la posibilidad latente de contar con una octava cita en el calendario del mundial de resistencia ya tiene un voto a favor de Sudamérica. Ese apoyo se da por parte de Jean-Marc Finot, jefe de deporte motor de Peugeot, que regresó a la divisional Hypercar con los dos 9X8 que lucharon lado a lado con los Toyota, Glickenhaus y Alpine.
Y con esta posibilidad de tener una nueva fecha a partir del 2024, en Francia esperan poder ampliar el rango y sumar a Sudamérica en lugar de repetir Europa. La idea radica en que se logrará una mayor visibilidad para la marca y la categoría en general regresando a una zona en la que no corren hace casi diez años.
En caso de llegar a Brasil, Argentina o Chile, los escenarios mejor preparados de estas naciones son el Autódromo de Termas de Río Hondo, donde compitió el WTCC, además de Interlagos, habitual plaza de la Formula 1. La presencia de José María López en la clase mayor podría incidir para que finalmente se decanten por Termas si es que escuchan el pedido del jefe de Peugeot.
‘Nos encantaría ir a Sudamérica, porque en Sudamérica hay gente muy entusiasta con el automovilismo‘, aseguró Finot. Y agregó: ‘Para la marca Peugeot también es interesante tener visibilidad en Sudamérica, ya sea Brasil, Argentina o Chile. Si hay alguna oportunidad, la apoyaremos‘.
La última visita del WEC a estas latitudes fue en 2014, cuando a fines de noviembre en San Pablo la victoria quedó en manos de Romain Dumas, Neel Jani y Marc Lieb con un Porsche (otras de las marcas que intenta regresar).
