A la postre, no fue tan difícil generar un aviso claro e inconfundible. La FIA aplicó una nueva medida en el GP de Estados Unidos para dar el aviso a todos los pilotos sobre la entrada de una grúa en la pista, tras la polémica que había reavivado el debate en Japón.
En aquella ocasión, un accidente de Carlos Sainz en la primera vuelta obligó a el ingreso de este vehículo pesado para retirar la Ferrari. Pierre Gasly, rezagado, pasó muy cerca sin estar enterado de que estaba allí una grúa. Su enojo fue tal que la FIA abrió una investigación y, tras admitir «problemas de procedimiento», tomó una determinación.
Así es que en el Gran Premio disputado en Austin, la situación tuvo un cambio. Cuando Valtteri Bottas tuvo una salida de pista en la penúltima curva y fue necesaria la grúa, un mensaje llegó a todos: «Vehículo de recuperación en la pista en la curva 19».
Según Gasly, «fue un mensaje que me hubiera gustado tener en Suzuka porque habría cambiado por completo mi enfoque en esa zona«. Lando Norris se unió al decir que fue un «paso adelante«, apoyado también por Carlos Sainz en el punto de vista: «Me encanta la proactividad y las reacciones cuando las cosas no salen según lo planeado, que la FIA se lo tome en serio, elabore un informe y trate de sacar conclusiones«.