A raíz de una publicación del diario italiano La Gazzetta a la que luego se sumó el histórico periódico británico Daily Mail, comenzó a circular el rumor de un posible vínculo de Lewis Hamilton con Ferrari para la próxima temporada. Según sus artículos, la escudería italiana estaría dispuesta a firmar un contrato en una cifra cercana a los 45 millones de euros al año. También se afirma que el presidente de Ferrari, John Elkann, está en contacto muy cercano con el siete veces campeón del mundo, a quien había tentado en 2019 para sumarlo a sus filas.
No es menos importante que el contrato de Hamilton con Mercedes vence al finalizar esta temporada, y que según el propio Toto Wolff, esta es la primera vez en más de diez años que sus objetivos parecen «divergir». Sin embargo, también declaró en una entrevista con el medio oe24 que «estas especulaciones suelen aparecer cada dos años, cada vez que hay que hacer una renovación del contrato. Pero nada de lo que se dice es verdad, se charlan las cosas tranquilamente y sin ningún tipo de presiones», restándole importancia a lo trascendido.
Los chismes fueron más allá e inclusive se vaticinó por quién ingresaría Hamilton al Cavallino Rampante. El inglés formaría pareja con el inamovible Charles Leclerc, ocupando la plaza que actualmente posee Carlos Sainz. Esto podría entenderse como una estrategia para desviar la atención del mal momento deportivo que vive la marca sumando a un campeón del mundo. La traba más importante en este sentido tiene que ver con el contrato de ambos pilotos de Ferrari, que todavía supone algo más de un año de duración.
A pesar de no haber inconvenientes en términos económicos, según informa la propia Gazzetta, el contrato con Ferrari no sería de fácil acuerdo. Actualmente, el vínculo de Hamilton con Mercedes supone una máxima libertad para el piloto de 38 años en la gestión comercial de su imagen. No es un detalle menor, teniendo en cuenta que Lewis ha montado una industria en torno a su figura y Ferrari suele manejar la imagen de sus pilotos siguiendo una línea corporativa. Además, hay que tener en cuenta el trabajo con la fundación Mission 44, que busca dar protección y oportunidades a las personas que provienen de los entornos más vulnerables y cuenta con el apoyo del equipo británico.
Lo concreto es que en la siguiente competencia de este fin de semana en el Gran Premio de Mónaco, Mercedes estrenará un nuevo piso, suspensión delantera y pontón en una nueva apuesta por acortar la diferencia que los separa de la dominante Red Bull. El éxito o el fracaso de estas actualizaciones podrían acercar o alejar al múltiple campeón con la escudería que lo acoge desde 2013.
